Desde bien pequeñitos todos esperamos que llegue el día de nuestro cumpleaños, el día más feliz de nuestras vidas, nuestros padres, hermanos y amigos nos despiertan para felicitarnos, nos colman de regalos y vivimos todo el día en una nube.
Como yo al despertarme, tus hijos, tu marido, tus hermanos, amigos y familiares se han despertado más pronto de lo habitual, algunos quizas han dormido mal. Hoy es tu cumpleaños y miles de recuerdos afloran, extraño querer hablarte y no poder hacerlo, querer verte, tocarte, besarte y tirarte de las orejas, pero no puedo.
Hoy desearia hacerte un solo regalo. Uno muy especial, me gustaria devolverte unos minutos, quizas unos segundos junto a los tuyos.